El 23 de mayo de 2014 nos dejó, después de años con problemas de salud, Gustavo Alcalde, guionista cuya obra estará para siempre indisolublemente unida a la trayectoria artística de Cruz Delgado, tanto en sus historietas como en sus películas de dibujos animados, formando un tándem profesional que se prolongó a lo largo de más de tres décadas.
Gustavo Alcalde Rodríguez nació en Madrid el 21 de abril de 1926 y desde muy joven se sintió atraído por el dibujo, orientando su actividad profesional como historietista en publicaciones infantiles de la época. Interesado también por la animación, a mediados de los años 50 entró a trabajar como intercalador en los Estudios Moro, al tiempo que lo alternó con ocasionales trabajos de locutor en el cuadro artístico de Radio Madrid. En aquellos años, Estudios Moro vivía una época de esplendor realizando films publicitarios en la que coincidió toda una generación de futuros animadores. Es allí donde Gustavo Alcalde conoce a Cruz Delgado en 1956 y entre los dos se establece una gran amistad al compartir aficiones y gusto por el mismo estilo de dibujo. Aunque ambos abandonan Estudios Moro algunos años después, Gustavo comenzó a escribir los guiones para las historietas que Cruz publicaba desde hace años en diferentes revistas de la época.
A principios de los años sesenta, Cruz Delgado monta su propio estudio de dibujos animados y Gustavo Alcalde se incorpora a él como dibujante, aunque irá abandonando progresivamente esta tarea para volcarse de lleno en su faceta literaria, dedicándose a escribir los guiones de los cortometrajes de personajes como el canguro Boxy o Molécula, este último protagonista de la primera serie de 13 episodios producida por TVE en 1968. Después Gustavo firmaría los guiones del primer largometraje de Cruz, Mágica aventura (1973), que obtuvo premios en festivales internacionales, y de El desván de la fantasía (1978), este último con dibujos y dirección de José Ramón Sánchez (otro ex compañero de Estudios Moro) en el que adaptó una colección de cuentos originales de José Luis García Sánchez y que tuvo también su versión en serie de televisión. Asimismo, también fue autor de la letra de algunas canciones de las mencionadas películas.
Pero sin duda la tarea más importante a la que se enfrentó Gustavo Alcalde como guionista llegó cuando se le encomendó la adaptación de Don Quijote de la Mancha (1979-81) para una serie de dibujos animados. Con la supervisión de expertos en la obra de Cervantes, supo condensar brillantemente las dos partes de la obra en 39 episodios de media hora. Producida por José Romagosa y dirigida por Cruz Delgado, fue la primera serie de dibujos animados de gran envergadura acometida por un estudio de animación español, alcanzando gran éxito de público y crítica, y fue emitida por televisiones de todo el mundo. Después, Gustavo firmaría los guiones de los largometrajes Los viajes de Gulliver (1983) y Los 4 músicos de Bremen (1989), y gran parte de los episodios de la serie derivada de este Los Trotamúsicos (1989-1990) con los que finalizaría su trayectoria como guionista.
Cabe destacar también que Gustavo Alcalde simultaneó su labor de guionista para Cruz Delgado con la de adaptador al castellano de muchos cómics editados en nuestro país por la editorial Ediciones Recreativas, especialmente las historietas realizadas por los Estudios Disney.
Gustavo Alcalde era el colaborador más veterano de las producciones de Cruz Delgado. Su carácter cordial y su sempiterno sentido del humor, que nunca perdió ni en los peores momentos, deja un recuerdo imborrable en todos sus amigos y compañeros de profesión. Siempre le echaremos de menos.
El valor histórico de esa grabación, de esa conversación entre estos dos grandes artistas resulta incalculable. Gracias por subirlo a la red para que admiradores como yo de la animación en general, y de la animación española en particular, podamos apreciarlo y disfrutarlo.
Aprovecho también para felicitarles por la página web, el blog y todos sus contenidos.
Un saludo.
Pablo
Soy sobrino de Gustavo Alcalde. Por circunstancias varias, no he mantenido mucho contacto con mi familia paterna, pero recuerdo perfectamente a mi tío Gustavo. Ha sido muy emocionante localizar este documento.